No hablar de ello no significa que no esté pasando

¿Cómo reaccionas ante un problema?¿Eres de las personas que necesitan hablar o por el contrario te ayuda ignorar el problema, hacer que no existe? El silencio o la comunicación; ¿por cuál te decantas?

Vivimos en un mundo impertérrito e impávido a las consecuencias terribles que crea el silencio.

 No hablar de un problema no significa que esté no exista

Si lo pensamos con frialdad es tomar el camino más corto y cobarde. Cuando optamos por no hablar un problema, optamos por ignorarlo y cuando lo ignoramos tenemos que ser conscientes de las consecuencias que eso puede tener para nosotros. No atacar ni afrontar un problema no hará que desaparezca sino todo lo contrario paradójicamente estamos mediante el silencio alimentando su existencia eterna. Lo que no resolvemos, nos perturba y por tanto no desaparece.

¿Cuántos de nosotros nos hemos visto en una discusión donde la otra parte, de repente, nos ha recordado algo que pasó hace tiempo que obviamente no fue resuelto en su momento y que hoy por hoy le sigue perturbando? ¿Cuántos de nosotros en ese momento entendemos por qué la relación con esa persona no es la misma que hace un tiempo? Todo es la culpa del SILENCIO. Ése que no olvida, no resuelve, no perdona y no soluciona. Ése que lo único que es capaz es de obviar, de malmeter, de agrandar situaciones, de magnificar consecuencias, de grabar en nuestra mente algo eternamente.

Cuando menciono, problemas, no solo me refiero a problemas o discusiones que hayamos podido tener con alguna persona importante para nosotros. Me refiero a todos los problemas que nos suceden en nuestras vidas por muy grandes o pequeños que parezcan. Cuanto más grandes son los problemas, más grande es el silencio y más grandes son sus consecuencias. Definitivamente, no compartirlos, no abordarlos, no resolverlos sólo nos llevan a una hecatombe.

Cuando te pasas la vida silenciando tus problemas y sin resolverlos, lo que haces es ponerles un parche, como los que ponemos a los pantalones cuando se rompen. El problema sólo ha sido tapado y como no ha sido resuelto cuando aparece tiene mucha más fuerza que al principio, se ha retroalimentado durante el tiempo que ha estado silenciado, porque nunca desapareció por tanto nunca se resolvió.

Recuerdo una frase de una persona que me dijo una vez:

“No, nunca solucionamos cómo nos sentimos sobre ese tema y como no lo hicimos,nuestra relación nunca volvió a ser la misma.”

El silencio a los problemas nos hace vulnerables, frágiles y cobardes. Destruye relaciones y agranda problemas. Por mucho que te cueste, haz frente a tus problemas e inquietudes. Da la cara porque una batalla nunca podrá ser ganada desde el silencio.